Aldea Global: La honestidad en el futuro gabinete de Víctor Castro

Quizá lo más trascendente en la resolución del TEEBCS, fue la evidenciada de la falsa honestidad del círculo cercano al futuro gobernador de BCS.

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La resolución de la Sala Regional de Guadalajara del Tribunal Electoral Federal, borró la sonrisa del presidente estatal de MORENA y del PT, Alberto Rentería Santana y Luis Armando Díaz, respectivamente.

Asimismo, aniquiló el triunfalismo de las ex candidatas del V y XV Distrito Electoral Local, Fernanda Villarreal González y Karina Olivas Parra, derrotadas en el proceso electoral pasado, después de que fueran devueltas las diputaciones a José Rigoberto Mares Aguilar y Armando Martínez Vega.

El 16 de agosto pasado, los magistrados del Tribunal Estatal Electoral, Sara Flores, Dulcinea Apodaca y Raúl Jiménez, revocaron la declaratoria de validez de la elección y la constancia de mayoría a los dos diputados electos de “Unidos Contigo”, por considerar que al momento del registro fue falsificada la firma del presidente del CDE del PAN, Carlos Rochín.

De manera inverosímil, el Tribunal Estatal Electoral, ordenó entregar nuevas constancias de mayoría a las candidatas de MORENA, a pesar de que fueron derrotadas en las urnas.

Las ex candidatas habían promovido los juicios de amparo, bajo el número de expediente 132/2021 y 133/2021, después de que la votación quedó de la siguiente manera:

En el V Distrito Electoral, el panista Armando Martínez Vega obtuvo 8 mil 376 votos contra 7 mil 464 de la ex priísta y ahora morenista, Fernanda Villarreal González.

En el XV Distrito Electoral, el panista José Rigoberto Mares Aguilar, sacó 9 mil 429 votos contra 7 mil 392 de la morenista Karina Olivas Parra.

Acuerpadas por los grupos mas podrido de la política de Baja California Sur, Fernanda Villarreal y Karina Olivas, trataron de arrebatar a la mala la diputación que perdieron en las urnas, y bajo el argumento de la firma falsa, intentaron burlar la voluntad popular.

Quizá lo más importante de todo este enredo, es que más allá del mandato constitucional de hacer valer el voto popular de los ciudadanos que salieron a votar por Armando Martínez Vega y José Rigoberto Mares Aguilar, quedó evidenciada la supuesta honestidad que promueven integrantes del círculo cercano del futuro gobernador de Baja California Sur, Víctor Manuel Castro Cosío.

La principal bandera del nuevo gobernador que tomará protesta el próximo 10 de septiembre, es precisamente la honestidad que –según él—“permitirá el cambio de rumbo que exigen los ciudadanos”.

El simple hecho de que Fernanda Villarreal y Karina Olivas, hayan aceptado recibir la constancia de mayoría, como diputadas electas, tras la resolución del TEEBCS, a sabiendas de no haber sido favorecidas por el mandato popular, deja en evidencia la esencia de la 4T.

Lo que desde luego permite deducir qué no son personas honestas y mucho menos confiables, como para ocupar un cargo público en la futura administración.

Lo mismo pasa con el líder estatal del PT, Luis Armando Díaz, y el dirigente estatal de MORENA, Alberto Rentería Santana, quienes, como políticos congruentes con los valores y principios de la 4T, debieron tomar el caso con cautela.

Sin embargo, los dos políticos que se jactan de ser demócratas, salieron a festinar y hasta ofrecieron una conferencia de prensa, presumiendo que accederían a esos dos cargos de elección popular sin haber obtenido el voto mayoritario del pueblo.

En el colmo del cinismo, y después de casi tres meses, la ex candidata a la alcaldía de Mulegé por Morena, Luz del Rocío Sánchez Martínez, impugnó el triunfo de la panista Edith Aguilar, creyendo ilusamente que podrían ganar en la mesa.

En política, cuando se comete un error con una argumentación, no se debe volver a cometer el mismo error con los mismos argumentos, porque el resultado es de sobra conocido.

Verdaderamente lamentable.

Hoy, y tras la resolución de la Sala Regional de Guadalajara, lo que menos tienen los magistrados del Tribunal Estatal Electoral de Baja California Sur, Sara Flores, Dulcinea Apodaca y Raúl Jiménez, es credibilidad y legitimidad, porque lo que es momento de que dejen el cargo si es que acaso conocen la dignidad y la vergüenza.

A escasos días de la sucesión gubernamental, habría que ver si el nuevo gobernador de Baja California Sur, Víctor Manuel Castro Cosío, está dispuesto a gobernar con este tipo de personajes, o bien, da una vuelta a la página e inicia una administración con perfiles que tengan valores y principios a prueba de todo.

Remolino:

El crimen de José Eduardo Avilés Quintero, ocurrido en la ciudad de Tijuana, no es obra de la casualidad. Hoy, se sabe que el joven de 23 años, no murió en un asalto, tampoco iba a comprar un carro. Inclusive, no traía dinero, porque tenía varias quincenas sin cobrar su sueldo en el Ayuntamiento de La Paz. Los agentes de la fiscalía general del estado de Baja California, que investigan el homicidio, tienen sospechas de que fue un ataque directo al corazón de Los Castro: José María y Víctor Manuel. Es más que evidente, lo difícil que es conciliar en política, cuando se establecen compromisos…

El ex gobernador Narciso Agúndez, no parecen traerlas todas consigo: primero el alcalde electo de Los Cabos, Oscar Leggs Castro, desechó a Luis Armando Díaz, como propuesta para que fungiera como secretario general del XIV Ayuntamiento, y después José María Avilés Castro, se cruzó en su camino, cuando intentaba convertirse en el presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política de la XVI Legislatura. La cereza del pastel, es que no va como director general del API, y ahora hace intentos desesperados por poner a su hijo Narciso, a su hija Argelia, o de plano, a su yerno Freddy Erubey Martínez Rivera. Desde luego, que los valores y principios que tiene de su padre y suegro, es de saquear los recursos públicos…

El pasado 24 de agosto, el Cabildo de La Paz asestó un artero golpe a las mujeres y niñas de Baja California Sur: el alcalde Rubén Muñoz Álvarez y los regidores salientes, cambiaron de forma sorpresiva, el Reglamento del Ayuntamiento. Eliminaron al Instituto Municipal de las Mujeres. La acción se dio a espaldas de las mujeres, y en evidente contubernio, con la alcaldesa electa, Milena Quiroga Romero, quien entrará en funciones el 27 de septiembre próximo. Con la excusa de crear la Dirección de Inclusión y Diversidad, “por cuestiones prácticas”, desaparecieron todos los institutos municipales, incluyendo el de las Mujeres, convirtiéndolos en pequeñas direcciones subalternas.

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