Puerto San Carlos, Baja California Sur.- La noche del jueves 9 de abril, el hogar del permisionario de pesca en Puerto San Carlos, Marcos Cazares, se vistió de gala para recibir a varios invitados que junto al representante de los pescadores en la entidad, celebraron el cumpleaños de su esposa, mientras el resto de los habitantes de esta región y de los pueblos cercanos, todos ellos pertenecientes al territorio de Comondú, atienden las recomendaciones de quedarse en casa por la emergencia sanitaria del virus del Covid-19 implementada en cada uno de los 5 municipios de Baja California Sur.
Sin pena alguna, y mucho menos sin acatar las medidas preventivas de la sana distancia y aislamiento social, el anfitrión de la velada tomó selfies junto con su pareja y amigos mientras convivían alegremente al ritmo de música norteña y de banda, además de amenizar el evento degustando botes con cerveza y tragos de whisky.
A pesar de que el municipio de Comondú se mantiene desde la semana pasada en Ley Seca por órdenes del gobierno municipal, y la cual prohíbe estrictamente la venta de alcohol en cada establecimiento que opera este giro comercial en la entidad, los participantes del festejo se las ingeniaron para conseguir bebidas embriagantes y asistir a la festividad.
A media fiesta, los vecinos de Marcos Cazares reportaron vía telefónica a la Policía Preventiva Municipal de Comondú, el escándalo por contaminación auditiva y estruendosas carcajadas y gritos provocados por la música y por el buen momento que estaban pasando las personas dentro de la casa del organizador de la juerga.
Sin embargo, las autoridades hicieron caso omiso a los llamados y optaron por dejar que el miembro de la asociación de pesca continuara divirtiéndose a sus anchas, sin importar que estuviera violentando gravemente las normas de salubridad y faltando el respeto a toda la sociedad comundeña que se mantiene resguardada en sus hogares para evitar algún posible brote de infección de Coronavirus en Puerto San Carlos, Ciudad Insurgentes y Ciudad Constitución.
Los invitados a la celebración, jamás se imaginaron que su borrachera se evidenciaría públicamente a través de las redes sociales, pero así fue.
Ya pasada de copas, la propia cumpleañera y esposa de Marcos Cazares, identificada como Mara “N”, sacó un teléfono celular de su bolso y pidió tomarse una fotografía con algunos de los amigos de la pareja que los acompañaron a conmemorar su onomástico. Bloqueada por la ingesta de alcohol, y en plena madrugada, la festejada subió la imagen a su Facebook, la cual permaneció algunos minutos a la vista de todos sus contactos, hasta que la misma protagonista de la fiesta, se percató de su error, y rápidamente volvió a ingresar a su perfil, borrando la publicación, pero ya era demasiado tarde.
Para entonces, la fotografía del delito ya estaba en varios dispositivos móviles, a través de capturas de pantalla, y por medio de la opción de Facebook de guardar imagen.
Así fue, como al día siguiente, cada uno de los rostros de la imprudencia e ignorancia, salieron a la luz, para ser criticados y juzgados duramente y sin cesar, por parte de decenas de usuarios en las redes sociales, exigiendo un castigo ejemplar para todos los fiesteros en Puerto San Carlos, justo en medio de una pandemia que amenaza con expandirse aún más, y que inclusive, hasta el momento, ha llegado a cobrar tres víctimas en el estado de Baja California Sur.