La Paz, Baja California Sur.- El gobernador de Baja California Sur, Víctor Manuel Castro Cosío, rindió su Tercer Informe de Gobierno, literalmente a puerta cerrada.
Con un pueblo bueno y sabio completamente ausente, el gobernante de MORENA, tuvo que rellenar de empleados el Centro de Convenciones de La Paz, localizado en el kilómetro 11 de la carretera de La Paz a Pichilingue.
«Tres Años de Transformación en Baja California Sur«, describía el fondo del escenario, utilizando como gancho las fotografías del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y la presidenta electa, Claudia Sheinbaum.
En la parte frontal del escenario estaba en primera fila el gabinete legal y gabinete ampliado, aplaudiendo a mas no poder cada palabra del gobernante, aunque la realidad en la calle fuera otra.
En el arranque de su discurso, el gobernador Víctor Manuel Castro Cosío, presumió que en los primeros tres años de gobierno, Baja California Sur había experimentado una «profunda transformación«, resultado del trabajo serio, responsable y transparente de su administración comprometida con el bienestar de los ciudadanos.
Es el caso de su hija Marcela Castro López, quien tras la llegada de su papá como gobernador del estado, casualmente fue designada como coordinadora de Modernización y Competitividad del IMSS, ganando un sueldo de 150 mil 822 mensuales, cantidad que cualquier profesionista, tardaría en ganar esa cantidad en el promedio de un año.
El sueldo de la hija del gobernador de MORENA, es apenas 33 mil 646 pesos menos que el salario de 184 mil 468 pesos del propio presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Pero la transformación llegó también para la vida de su otra hija, Patricia Isela Castro López, y la cual en el periodo de Adán Augusto López Hernández, fue sospechosamente contratada en el cargo de Subrepresentante de Coordinación con el Gobierno del Estado y Municipios por parte de la Secretaría de Gobernación, recibiendo un salario de 44 mil 268 pesos mensuales.
O bien, el de su concuño Bogdan Arriaga Benis, y quien gana un sueldo de 137 mil 955 pesos mensuales, como coordinador estatal de IMSS Bienestar en Baja California Sur.
“Hace tres años nos comprometimos con la ciudadanía a actuar con probidad, responsabilidad y decencia. Llegamos al gobierno no para exaltarnos, sino para fortalecer un proyecto político nacional alternativo al viejo régimen de corrupción, autoritarismo y saqueo”, todavía arengó cínicamente.
El gobernante se atrevió a hablar de principios éticos y morales, escudándose en la 4T, cuando es públicamente sabido que convirtió a asesor Narciso Agúndez Montaño, en el constructor consentido del Gobierno de Baja california Sur.
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Tan es así que, según una denuncia penal presentada desde noviembre de 2023 en la Fiscalía General de la República (FGR) y la Fiscalía Estatal Anticorrupción, Narciso Agúndez Montaño, encabeza una red de corrupción.
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La red de corrupción es operada por el hijo del ex gobernador, Narciso Agúndez Gómez, quien es director de la Administración Portuaria Integral (API), y a la vez, proveedor y constructor de obras pública del Gobierno del Estado y del Gobierno de México.
“Con el pueblo todo, sin el pueblo nada”, dijo, en un escenario precisamente, donde no había pueblo, sino servidores públicos a su servicio.
Eso sí, Víctor Castro, expresó su gratitud a los servidores públicos que han trabajado con «responsabilidad» y «esmero» para cumplir con los compromisos adquiridos.
Finalizó su mensaje exhortando a su equipo a continuar trabajando en la «transformación» de Baja California Sur, desterrando las viejas prácticas de gobierno y reafirmando la convicción de la transparencia y la justicia.