La Paz, Baja California Sur.– «En paz descansa Madre Mía, que descanses eternamente, te amo y te extrañare tanto«, así se despidió de su mamá el pasado dos de abril, el hijo mayor de la joven Grecia de Torre Flores, asesinada el pasado dos de abril en la masacre de la Colonia Guerrero de esta Capital del Estado.
En su cuenta oficial de Facebook, el joven Carlos Augusto «N», colocó un lazo negro en señal del luto por la perdida de su mamá, después del artero crimen perpetrado por un militar en activo.
A partir de hoy, el joven de 18 años, tomará la responsabilidad de sus dos hermanos menores, Kevin «N» y Luna «N».
El asesinato de Grecia de la Torre Flores y de los otros tres civiles, provocó una fuerte indignación social, particularmente porque las víctimas eran personas de bien y no estaban involucradas en temas delictivos o no tenían antecedentes penales.
En el caso de Grecia de la Torre Flores era madre soltera muy trabajadora que a base del esfuerzo, había logrado abrir un negocio de bebidas preparadas llamado «Clamatos y Botanas Beys«.
La joven tenía desde hace tiempo una relación sentimental con Saúl Cota Nuñez, otras de las víctimas.
De hecho, la pareja de Gress –como era conocida la joven de 33 años–, había organizado un festejo para su novia por sus 33 años en su casa, localizada en la calle de Santos Degollado entre México y Melitón Albañez en la Colonia Guerrero de La Paz.
Fue justamente en su fiesta, cuando perdió la vida, después de ser atacada a sangre fría por un soldado del Ejército Mexicano, después de tener un incidente vial en la esquina de la cuadra, donde ocurrió la masacre.