Los Cabos, Baja California Sur.- Ante la grave crisis económica derivada de la emergencia sanitaria por el Covid-19 vivida actualmente en el destino de Los Cabos, algunos vendedores ambulantes permanecen recorriendo las principales zonas y plazas comerciales de la región, pero ya no intentan vender los productos que ofrecen comúnmente, sino proponer “trueques” a cambio de alimentos, y de esta manera, continuar sobreviviendo a la pandemia que azota a esta entidad localizada al sur de la península sudcaliforniana.
Tal es el caso de Margarita, una vendedora de artesanías que arribó a Los Cabos, procedente del poblado de Tlaxiaco, Oaxaca, con el objetivo de mejorar su calidad de vida en beneficio de su familia.
Margarita, se dedica a la venta de sombreros solares, los cuales son tejidos a mano al estilo de los artesanos de Oaxaca, Guerrero y Puebla.
Como ella, muchos otros vendedores ambulantes vieron truncada su única fuente de ingresos con la llegada del nuevo Coronavirus a Los Cabos, ya que, tras la implementación de las medidas sanitarias de prevención en el destino local, no tienen la opción de esperar resguardados dentro de sus hogares a que finalice la pandemia, por la razón de que viven al día, y aunado a la enorme responsabilidad que representa el tener que alimentar a sus familias, la única salida por el momento es salir a las calles a intercambiar sus productos por algo de despensa o algún tipo de alimento, directamente.
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“Necesito comida para alimentar a mis hijos, por estoy cambiando mis sombreros por comida”, salió de la desesperada voz de Margarita, quien dijo que ella, su esposo y cuatro hijos, se encuentran solventando sus necesidades alimenticias gracias a la caridad de las personas que salen continuamente a realizar actividades esenciales alrededor del área turística de Los Cabos, y quienes no han dejado desamparada a esta incansable artesana, que lucha diariamente por sacar adelante a su familia.
Como ya es por todos conocido, la industria productora y de servicios de Los Cabos, cayó dramáticamente hasta en un 0 por ciento, después de que se decretó la alerta sanitaria por el nuevo Coronavirus, provocando que miles de viajeros extranjeros volvieran a sus países de origen abandonando el destino, lo cual trajó como consecuencia el hundimiento de la economía turística de la entidad.
“A pesar de que por el momento no vaya a utilizar los sombreros, cambié algunos platillos de guisados de res y pollo por un par de ellos. En estos tiempos, debemos ser solidarios, y apoyarnos entre todos”, comentó una mujer habitante de Los Cabos, mientras negociaba con Margarita, proporcionándole el alimento del día a cambio de sus productos.
Sin embargo, desde que el Covid-19 dejó sentir su presencia en Baja California Sur, la fortuna dejó de sonreírles a todos los trabajadores que dependen de la derrama económica que dejen los turistas en el destino para poder ganarse la vida.
De acuerdo a las estadísticas mostradas por parte de la Secretaría de Turismo de Baja California Sur, la pandemia por el Coronavirus le costará al estado sudcaliforniano decenas de millones de pesos en ingresos, por lo que ya se plantean las nuevas estrategias y campañas que se realizarán de manera emergente para reactivar la económica en toda la media península, lo más pronto posible.
Emulando a Margarita, cientos de comerciantes ambulantes distribuidos en los 5 municipios de Baja California Sur, han tenido que cambiar sus artesanías regionales por cubrebocas, medicamentos, y productos de canasta básica, para poder subsistir a la pandemia que ha transformado drásticamente sus estilos de vida, mermando su oferta y demanda al grado de ofrecer trueques para continuar sobreviviendo.