La Paz, Baja California Sur.- El pasado 10 de agosto, Jesús Pérez Giménez, volvió a la ciudad de La Paz, luego de un viaje de trabajo al estado de Jalisco.
Sin embargo, tiempo después de haber descendido del avión, el hombre de 54 años de edad, comenzó a presentar una preocupante tos crónica y constantes episodios de fiebre, los cuales fueron aumentando en el transcurso de las horas.
La familia del empleado expuso que la salud de Jesús empeoró, tras regresar de la perla tapatía, cuando comenzó a sospechar de una posible infección por Covid-19.
Por lo anterior, acordaron llevarlo a consulta médica y a realizarle la prueba de laboratorio esta misma semana, mientras mitigaban los malestares del enfermo con remedios caseros y medicinas para controlar la tos y la alta temperatura corporal, aislándolo temporalmente en su domicilio ubicado en las calles 5 de Febrero entre Juan Domínguez Cota y Bonifacio Salinas Leal, en la colonia Los Olivos.
No obstante, el traslado al hospital nunca llegaría, ya que la mañana de hoy, la hija del sospechoso de Covid-19, descubrió que su padre estaba tirado dentro del baño de su hogar, y con una lesión en la parte frontal de su cabeza, después de caer y golpearse en el piso.
Al notar que el pálido hombre yacía en el suelo del sanitario y no reaccionaba a los estímulos de sobrevivencia, la angustiada mujer de 39 años, llamó inmediatamente a los servicios de emergencia, ya que requería atención médica de urgencia.
Desafortunadamente, cuando los paramédicos de la Cruz Roja llegaron al sitio de los hechos, y examinaron la condición clínica de Jesús, este ya no contaba con signos vitales, por lo que se dictaminó su muerte.
Hasta el momento, autoridades y médicos forenses investigan si las causas del fallecimiento fueron provocadas por el golpe recibido, luego del desvanecimiento de la víctima o por un fulminante paro cardiorespiratorio que terminaría por arrebatarle la vida en un momento de crisis por la tos y la calentura, derivada del Coronavirus.
