Loreto, Baja California Sur.- Los habitantes del Pueblo Mágico no pudieron resistir más, y no tuvieron más remedio que organizarse y salir a las calles a manifestarse en contra de la peor escasez de agua en la historia de ese municipio ante la apatía de la alcaldesa Arely Arce Peralta, y quien hasta el pasado 8 de julio, no había hecho nada por revertir la grave situación en la mayoría de las colonias.

El pasado 10 de julio, alrededor de las 6:30 de la tarde, un centenar de personas literalmente se plantaron afuera de la oficina de la Dirección de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento de Loreto, exigiendo lo que mensualmente pagan en el recibo: ¡agua!.

Los reclamos y las peticiones se hicieron más fuertes conforme se unía más gente a la comitiva, buscando un objetivo en común: el agua en Loreto, después de casi un mes de escases en pleno verano, lo que denotó en un conflicto social.

Con carteles y pancartas donde se podían leer enunciados como “¡agua si, excusas no!” “pagos justos, ¡no más robos en SAPAL!” “pago cuota, quiero agua”, los ciudadanos loretanos expresaron su inconformidad por la ausencia de agua en sus hogares y negocios, ya que en plena emergencia sanitaria por el Covid-19 en la entidad, decenas de personas deben extremar sus cuidados en higiene personal, desinfección de utensilios de cocina y en las inmediaciones de viviendas, actividades básicas de prevención, pero requieren agua.

Esta marcha es de apoyo de ciudadano a ciudadano loretano, ¡basta de simulaciones, ¡soluciones prontas y efectivas!”, comentó uno de los asistentes a la manifestación, mientras levantaba con sus brazos una cartulina de color naranja vibrante, con la leyenda escrita “¡Queremos agua ya!”.

Y es que a decir de los inconformes, el dinero que mensualmente pagan por el servicio de agua, no se invierte en el mejoramiento de la red ni tampoco en infraestructura, sino va al bolsillo del esposo de la alcaldesa, Arturo Surrarey Amador, un comerciante que en los dos periodos de Arely Arce Peralta, enriqueció impunemente bajo el amparo del poder.

La crisis social por la falta de agua en Loreto se ha venido agudizando durante los últimas semanas, mientras que la alcaldesa, Arely Arce Peralta, presionada por la población y por los mismos integrantes del cabildo de Loreto, inicio apenas el pasado 8 de julio, el mantenimiento y la reparación del acueducto de San Juan Londó.

A la par de las protestas, los propios inconformes, sacaron a relucir que la alcaldesa Arely Peralta Arce, esconde las cuentas del agua que deberían ser públicas y no entrega de los documentos oficiales de egresos al Consejo Consultivo Ciudadano, desde hace 5 ciclos fiscales atrás.

Así, en tanto, el organismo operador del suministro de agua, recibe ingresos en promedio por 15 millones de pesos anuales, el servicio es de pésima calidad.

Con tal cantidad de dinero recibido, de acuerdo a protestantes, es increíble que no se puedan instalar nuevas tuberías y mejorar la infraestructura para evitar estos lamentables daños contra la propia sociedad.