La Paz/Baja California Sur/Noticias.- Una residente extranjera de 24 años fue víctima de violación por parte de un socio conductor de UBER, en la capital del estado.
De acuerdo al testimonio de la denunciante del abuso sexual, de nacionalidad estadounidense, alrededor de la 11:40 de la mañana del pasado 10 de marzo, solicitó un servicio de transporte.
Minutos después, llegó a la puerta de su domicilio, un automóvil color rojo marca Mitsubishi Mirage, y abordó.
Al observar al chofer que conducía la unidad, notó que era la misma persona que ya le había prestado servicios de viaje en anteriores ocasiones. Se sentó, confiada, en el asiento trasero del coche, esperando llegar a su destino.
Sin embargo, el conductor de UBER tenía otras intenciones.
Tras haber iniciado el viaje, la pasajera se percató que el chofer se desvió de la ruta solicitada, dirigiéndose a un solitario paraje alejado de la ciudad.
A pesar de las preguntas, el socio conductor solo le comentó que «había olvidado algo, que iría a recoger unas cosas para después finalizar el servicio».
Ambos tripulantes, llegaron a una recóndita zona de monte. El chofer detuvo el auto, para pasarse rápidamente al asiento de atrás, y sujetar a la joven de ambas manos.
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“Me tomó con fuerza. Yo le comencé a gritar que me dejara, pero él me contestó que solo duraría tres minutos”, narró en su denuncia la mujer afectada.
Posteriormente, el agresor bajó el short de su víctima hasta las rodillas, introduciéndole los dedos en la zona íntima, y continuar con la agresión sexual.
El violador bajó el pantalón y consumó la violación.
Después, el violador se acomodó el pantalón y volvió al asiento de piloto de la unidad, para alejarse del lugar de la violación.
En el asiento trasero iba la joven, que no salía del shock mental de haber sido ultrajada.
El chofer dejó a su víctima en la dirección solicitada, para gritarle que se bajara de su auto y que no se le ocurriera decirle nada a nadie, de lo contrario él, ya sabía dónde vivía y la buscaría para hacerle daño.
Lo primero que hizo la víctima al descender del coche, fue llamar al 911 y solicitar apoyo de emergencia. Al llegar unidades de Seguridad Publica al sitio donde se encontraba la joven, ya la acompañaba una amiga.
Ambas mujeres interpusieron la denuncia correspondiente, por los delitos de retención de personas, abuso sexual y amenazas de muerte en contra de la chica norteamericana.
El chofer conductor de la plataforma UBER, fue reconocido como Eynar “N”, trabajador de la compañía de servicios.
Hasta estos momentos, el violador de mujeres es buscado por las autoridades para que responda y pague por los graves daños causados a su víctima.